Como ya nos hemos acostumbrados, desde décadas, ridículamente se habla de la "crisis de la educación", del "sistema educacional", sin entender, que es necesario hablar de crisis del sistema político y social imperante, del modelo de sociedad en función, del cual, la educación y su gestión es parte integrante, la "crisis en el sistema educativo", no es mas que una expresión de la crisis del sistema social en su conjunto, es la muestra de que este al estar basado en el dominio de unos pocos, de los dueños del capital, no puede servir, ni satisfacer al conjunto de la población, particularmente a los trabajadores y a sus hijos.
Resulta pues cansador, tener que cada cierto tiempo, estudiar y dar respuesta a las propuestas o proyectos emanados de las "autoridades", los cuales supuestamente solucionarían la "crisis en educación", así hemos tenido que hacerlo frente a cada "reforma" y normativas, con gran empeño lo hicimos frente a la puesta en marcha de la "Evaluación Docente", tan querida y apoyada por Jorge Pavez (Colegio de Profesores) y desenmascarada por su carácter punitivo, por muchos de nosotros, incluyendo a algunos, que hoy se olvidaron de esa lucha, no sólo de esa, de todas las luchas y en que la búsqueda del "fin a la exclusión" se enrogullecen compartiendo tortas o la torta, con el gobierno y sus ministros de turno. De cualquier forma reiteramos, para despejar alguna odiosa confusión, que NO queremos ser incluidos en este sistema y su ordenamiento jurídico, social y político, por el contrario luchamos por su superación.
Por estos días y como una manera de crear confusionismo e ilusiones, el gobierno, en respuesta a la gran exigencia de cambio en educación que la sociedad hizo patente durante las movilizaciones estudiantiles del 2006, ha enviado al "Congreso Nacional", otra perla del sistema, un proyecto para establecer una nueva Ley General de Educación, la que ha generado un gran ruido particularmente en dos puntos, la verdad es que no tiene mucho más, más bien este proyecto NO CAMBIA NADA FUNDAMENTAL, ¿y, se podría esperar otra cosa?.
En el articulo 44 de proyecto se estable un supuesto fin al lucro, pero dejando de lado, si se puede, el hecho de que vivimos en un país que justamente todo esta basado en el lucro o la ganancia, el ejecutivo más bien como un distractor para los incautos y/o dulce para los desvergonzados que posan de "izquierda" y "sociales", sostiene sin más argumentación "el fin al lucro", ¿de que hablamos, si eso ya existe para las Universidades y la verdad es que nadie podría decir que no lucran con la educación?, tanta candidez no es tolerable.
Lo importante no es el envoltorio, sino lo esencial y esto es que estamos frente a la monopolización de la educación subvencionada, ¿de qué otra manera se puede entender el hecho de pasar del sostenedor individual a las corporaciones y fundaciones privadas?, sin duda de lo que trata de fortalecer es el papel de congregaciones religiosas, particularmente las más conservadoras, de las organizaciones gremiales patronales como la SOFOFA, SNA y otras que tienen experiencia en la formación de mano de obra adecuada y cautiva para su sector productivo. El proyecto sostiene como una de las condiciones para ser sostenedor el contar con un patrimonio determinado, al menos uno debe preguntarse ¿Quiénes cuentan con tal patrimonio?.
El proyecto que los avergonzados califican de "progresista", no modifica las exigencias para la educación superior, continuará con el mismo mercantilismo de tiene hoy. Seguirá la proliferación irracional de carreras y la sobre saturación de profesionales, la venta de ilusiones, es decir el lucro que dicen que no existe en las universidades, lo mismo es onomogable para la Educación Básica y Media.
En su articulo 12, otro de los que a causado " gran debate" se establece que no podrá haber selección de alumnos en los colegios hasta 8º básico, sin embargo si en enseñanza media, aquí cabe al menos una pregunta ¿Qué criterios se usa para definir lo que no es bueno para enseñanza básica y si lo es para media?, no es que estamos frente a un volador de luces, al uso de la demagogia pura, dando la sensación que hay un avance, cuando en realidad no ha pasado nada, ¿A caso no es claro que tradicionalmente la población en Chile pone mayor atención en la enseñanza media a la hora de elegir continuidad de estudio, justamente donde se mantiene la selección?, ¿Cuál es el cambio?.
Como broche de oro solo y para mayor vergüenza de los avergonzados, el proyecto estrella de Bachelet consagra la evaluación a estudiantes, docentes y establecimientos pero la evaluación no existe para el MINEDUC ni para los sostenedores (municipales o privados), como siempre la cuerda se corta por lo más delgado y la hora de buscar culpables solo están disponible los estudiantes, sus familias y por cierto los profesores.
Por último NO resguarda ningún derecho de los profesores, quedan prácticamente sin voz en la formulación de los programas educacionales, esto además de una aberración pedagógica, minimiza el papel del docente, pero sin duda sobre él se seguirá haciendo recaer toda la responsabilidad de los supuestos "fracasos" educativos, cuando hay éxitos, era que no, estos son de los sostenedores, del sistema.
Es hora de que en la educación, como en toda la sociedad se den más nueces que ruido y eso sólo será posible si tomamos en nuestras manos la solución y logramos la transformación social que reclama la sociedad, por lo pronto a mejorar nuestra organización, a despreciar a los dirigentes corruptos y pro patronales, a elegir dirigentes honestos y combativos en los sindicatos de educación en el Colegio de Profesores, a alzar la voz desde nuestros intereses como trabajadores.
Resulta pues cansador, tener que cada cierto tiempo, estudiar y dar respuesta a las propuestas o proyectos emanados de las "autoridades", los cuales supuestamente solucionarían la "crisis en educación", así hemos tenido que hacerlo frente a cada "reforma" y normativas, con gran empeño lo hicimos frente a la puesta en marcha de la "Evaluación Docente", tan querida y apoyada por Jorge Pavez (Colegio de Profesores) y desenmascarada por su carácter punitivo, por muchos de nosotros, incluyendo a algunos, que hoy se olvidaron de esa lucha, no sólo de esa, de todas las luchas y en que la búsqueda del "fin a la exclusión" se enrogullecen compartiendo tortas o la torta, con el gobierno y sus ministros de turno. De cualquier forma reiteramos, para despejar alguna odiosa confusión, que NO queremos ser incluidos en este sistema y su ordenamiento jurídico, social y político, por el contrario luchamos por su superación.
Por estos días y como una manera de crear confusionismo e ilusiones, el gobierno, en respuesta a la gran exigencia de cambio en educación que la sociedad hizo patente durante las movilizaciones estudiantiles del 2006, ha enviado al "Congreso Nacional", otra perla del sistema, un proyecto para establecer una nueva Ley General de Educación, la que ha generado un gran ruido particularmente en dos puntos, la verdad es que no tiene mucho más, más bien este proyecto NO CAMBIA NADA FUNDAMENTAL, ¿y, se podría esperar otra cosa?.
En el articulo 44 de proyecto se estable un supuesto fin al lucro, pero dejando de lado, si se puede, el hecho de que vivimos en un país que justamente todo esta basado en el lucro o la ganancia, el ejecutivo más bien como un distractor para los incautos y/o dulce para los desvergonzados que posan de "izquierda" y "sociales", sostiene sin más argumentación "el fin al lucro", ¿de que hablamos, si eso ya existe para las Universidades y la verdad es que nadie podría decir que no lucran con la educación?, tanta candidez no es tolerable.
Lo importante no es el envoltorio, sino lo esencial y esto es que estamos frente a la monopolización de la educación subvencionada, ¿de qué otra manera se puede entender el hecho de pasar del sostenedor individual a las corporaciones y fundaciones privadas?, sin duda de lo que trata de fortalecer es el papel de congregaciones religiosas, particularmente las más conservadoras, de las organizaciones gremiales patronales como la SOFOFA, SNA y otras que tienen experiencia en la formación de mano de obra adecuada y cautiva para su sector productivo. El proyecto sostiene como una de las condiciones para ser sostenedor el contar con un patrimonio determinado, al menos uno debe preguntarse ¿Quiénes cuentan con tal patrimonio?.
El proyecto que los avergonzados califican de "progresista", no modifica las exigencias para la educación superior, continuará con el mismo mercantilismo de tiene hoy. Seguirá la proliferación irracional de carreras y la sobre saturación de profesionales, la venta de ilusiones, es decir el lucro que dicen que no existe en las universidades, lo mismo es onomogable para la Educación Básica y Media.
En su articulo 12, otro de los que a causado " gran debate" se establece que no podrá haber selección de alumnos en los colegios hasta 8º básico, sin embargo si en enseñanza media, aquí cabe al menos una pregunta ¿Qué criterios se usa para definir lo que no es bueno para enseñanza básica y si lo es para media?, no es que estamos frente a un volador de luces, al uso de la demagogia pura, dando la sensación que hay un avance, cuando en realidad no ha pasado nada, ¿A caso no es claro que tradicionalmente la población en Chile pone mayor atención en la enseñanza media a la hora de elegir continuidad de estudio, justamente donde se mantiene la selección?, ¿Cuál es el cambio?.
Como broche de oro solo y para mayor vergüenza de los avergonzados, el proyecto estrella de Bachelet consagra la evaluación a estudiantes, docentes y establecimientos pero la evaluación no existe para el MINEDUC ni para los sostenedores (municipales o privados), como siempre la cuerda se corta por lo más delgado y la hora de buscar culpables solo están disponible los estudiantes, sus familias y por cierto los profesores.
Por último NO resguarda ningún derecho de los profesores, quedan prácticamente sin voz en la formulación de los programas educacionales, esto además de una aberración pedagógica, minimiza el papel del docente, pero sin duda sobre él se seguirá haciendo recaer toda la responsabilidad de los supuestos "fracasos" educativos, cuando hay éxitos, era que no, estos son de los sostenedores, del sistema.
Es hora de que en la educación, como en toda la sociedad se den más nueces que ruido y eso sólo será posible si tomamos en nuestras manos la solución y logramos la transformación social que reclama la sociedad, por lo pronto a mejorar nuestra organización, a despreciar a los dirigentes corruptos y pro patronales, a elegir dirigentes honestos y combativos en los sindicatos de educación en el Colegio de Profesores, a alzar la voz desde nuestros intereses como trabajadores.
